Aún hoy día se aprecia el foso excavado delante de la barbacana que era utilizado para proteger la contramuralla y el propio muro del castillo. Se caracteriza por ser un foso seco, que nunca tuvo agua.
Desde el lado sur del foso, junto al nuevo paso abierto bajo la muralla con la reciente restauración, se puede acceder a la Huerta del Duque y al exterior de la muralla para poder recorrer la muralla a nivel del suelo.