Esta pequeña puerta que comunicaba la ciudadela con la ciudad por el lado Norte de la Villa se conoce con éste nombre porque se considera que el barrio judío se encontraba en este entorno del segundo recinto murado entre la puerta de la Judería y la puerta de San Andrés.
La puerta fue realizada con sillares de piedra caliza, formando un arco rebajado en el que se pueden apreciar los quiciales de piedra que muestran que se cerraría con dos puertas de madera con unas medidas de 350 cm de altura por 115 cm de anchura por cada una de las hojas.